En toda relacion de pareja existe un diseño del pináculo de la felicidad a gusto de cada matrimonio, el más común es tener hijos que trae consigo la dicha y felicidad de dicho evento, nuevos integrantes a la familia y retos personales, que ya no son tan individuales, tienes que pensar en otro u otros más. Es totalmente normal que se descuide la relación, como amantes y amigos por el cambio de nuevo rol: ser padres responsables, amorosos y adultos a su vez.

Distinguir factores y soluciones

Existen millones de factores que impiden a la pareja reconectarse con la naturalidad de antes, pues ahora existen los proyectas entorno a los niños y su función de padres.

¿Dónde quedan sus problemas como pareja? Seguramente estancados en los gastos financieros para la escuela de los niños, medicina, ropa, comida, actividades extracurriculares y caprichos de los hijos, así como en el ensayo y error de proporcionarle valores y bienestar a su pequeña familia, en el hogar.

Aquí no hay cabida para solventar el apagón a su vida de dos. Pues ahora, siquiera se refieren a ustedes como sujetos sino “papá y mamá”.

Primero y en tema:

Lo ideal, es evitar a la primera señal que esto ocurra, aunque es totalmente humano no notarlo hasta ya muy avanzado el problema, cuando incluso “tu bebé” ya sale solo y estudia en la universidad. Pero las señales están latentes.

Platicar, salir a comer solos, darse un capricho o un obsequio es lo bonito de tener a un compañero de vida a su lado, no solo limitarse a contemplar como sus vidas siguen avanzando enfocados únicamente en sus hijos y dejándose de lado como humanos y una relacion de pareja sin ir superando obstáculos.

El sexo es un papel atractivo y realmente gratificante, más aún si este es un tema abandonado entre ambos adultos y tiene una función, (que ya no es procrear ni experimentar como primerizos) la cual es desestresarse, conectarse, alimentar su autoestima, y por último conocerse, por más extraño que suene, porque con los nuevos asuntos y rutina como padres muchos factores entre ambos cambiaron. Sería hora de volver a tener esa conexión y curiosidad entre cada uno.

Ser confidente el uno del otro, es donde ambos comparten sus victorias y miedos, lo cual será grato debido a que incluso tendrán puntos y temores en común que pensando como equipo podrán lidiar, sin juzgarse y sin apresurarse.

Evitar que ya pasada la emoción de tener un recién nacido en sus brazos, este sea el centro e inversión de su universo, no por esto serán malos padres, pero tampoco dejar de lado su amor propio e individualidad. Colocando una referencia a esto último agregaré; para recrear una construcción la relacion de pareja tiene una tabla de madera que servirá de techo y dos pilares de marfil, e intentan hacer una entrada totalmente uniforme, si uno de los pilares se derrumba o falta se caerá el techo, ¿Qué será de ese trozo de madera si colapsan ambos pilares? Eso es trabajar en equipo.

Mantener el respeto, la honestidad y amor en el hogar es sumamente importante para que sean las energías y educación proyectada a todos los miembros de la familia, y de esta manera todos crezcan de manera armoniosa, y los miembros fundadores dejen su síndrome de papá y mamá, desconocidos a padres amorosos y entre ambos siga esa armonía creada al momento de enamorarse.