El deseo de cambiar de cabello es común entre muchas mujeres. El cabello rizado, por ejemplo, suele optar por alisar los mechones, en un intento por reducir el cuidado y la preocupación. Sin embargo, el resultado de mantenerlos naturales puede ser muy ventajoso.
Según el estilista Léo Lima, el cabello rizado nunca pasa de moda. Quienes no los tienen suelen recurrir a productos y herramientas que ofrecen el efecto. Sin embargo, los afortunados dueños de los rizos naturales saben que el aspecto es increíble, pero el mantenimiento no lo es tanto.
“Las ventajas y desventajas de tener el pelo rizado son muchas”, revela la profesional. Los rizos requieren un cuidado especial para ser siempre brillantes y con volumen controlado, pero la textura también puede ayudar en algunos casos, como cuando el cabello se daña por químicos o temperatura: “dependiendo del tipo de rizo, el desgaste es aún menos visible en cuenta volumen ”.
Vea a continuación los dilemas comunes de quienes tienen el cabello rizado. ¿Alguna vez te has enfrentado a estas situaciones a diario?
1. Peina tu cabello: solo si está mojado
El acto de peinar el cabello cuando está seco puede dañar la forma de los rizos, dejando el cabello con volumen y sin definición. Además, los rizos traen la formación de nudos, lo que significa que intentar peinarlos no será tarea fácil.
2. Viva buscando buenos champús
Los champús prometen disminuir el volumen, definir los rizos y reducir el frizz. Sin embargo, sabes que este resultado también depende de cómo reaccionará tu cabello al producto. Aun así, no puedes resistirte a probar una nueva marca si escuchas a alguien con cabello rizado decir que obtuviste buenos resultados con ella. Y solo usted sabe cuánto tiempo y dinero gasta en ello.
3. Dependerá para siempre de las cremas sin enjuague
Lávate el cabello con champú y acondicionador y sal de casa, dejándolo secar de forma natural: nunca. Las cremas de acabado son fundamentales para definir los rizos y ayudar a reducir el frizz. Son tus mejores amigos e incluso merecen un paquete más pequeño para llevar en tu bolso.
4. Morir de miedo cuando tocan tu cabello
El cabello rizado no fue hecho para que la gente pasara las manos o lo acariciara con los dedos. Eso es porque puede aumentar la grasa de las hebras, además de deformar los rizos. Entonces, si ves a alguien a punto de hacer esto, tu reacción no es la mejor.
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5. Despertar cada día con tu cabello de alguna manera
“Cuando duermes, los rizos se abren y pierden su efecto, dejando un volumen descontrolado”, dice Léo. Por eso, mirarse en el espejo al despertar siempre es una sorpresa. Para no empeorar la situación, evite dormir con cables mojados.
6. No poder mover el cabello de un lado a otro
El cabello liso tiene la ventaja de poder tirarse hacia un lado y el otro, atado o suelto, y no se marcará. El rizado es bastante diferente: “hay que meter el pelo ahí, hay que dejarlo ahí”, refuerza la profesional. Cambiar la posición descontrolará el volumen y los rizos se perderán. Entonces, cuando lo arregles, esperas que nada te saque de lugar. Pero nada impide que los días en los que tu cabello está de buen humor, lo sacudas como Joelma en el escenario.
7. Tener la lluvia y la humedad como peores enemigos
La lluvia y la humedad siempre traen una cosa: frizz. Y por mucho que intente cubrirse, sabe que el efecto será el mismo. A veces, incluso preferiría quedarse en casa antes que tener que lidiar con este problema.
8. Vivir en la frontera entre un cabello hermoso y un cabello desordenado
El cabello rizado tiene la ventaja de ser versátil: puede ser completamente formal o mucho más claro, dependiendo de cómo se peine. Sin embargo, esta cualidad puede convertirse en un defecto cuando la relajación y ligereza del cabello rizado trae la sensación de desorganización.
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9. Pasa tu vida tratando de contener el frizz
Él siempre será el principal responsable de que no estés satisfecho con tu cabello, y por eso, te pasarás la vida tratando de escapar de él, aunque esta tarea sea la más difícil. ¿Sientes el viento en tu cara? Para ti, esto es sinónimo de frizz. Entonces dispensa.
10. Pero a pesar de todo, nunca quiero suavizar
Y a pesar de todos los esfuerzos que exigen, tus rizos te dan confianza en ti mismo y nunca querrás renunciar a ellos. Cuando los ves ordenados, te rindes a todas las veces que pensaste en alisarlos.
Los rizos requieren cuidados como cualquier tipo de cabello y pueden ser aún más difíciles de controlar. Pero no olvides que los esfuerzos necesarios para cada tipo de rizo dependerán de la estructura de las hebras, las circunstancias genéticas e incluso tu estilo de vida. Conoce las tuyas y cuídalas de la mejor manera, ya sea para hacerse cargo o alisarlas. Lo importante es que te sientas bien y tu cabello te quede bien.